TRAICIONES PERREDISTAS EN EL PASADO PROCESO ELECOTRAL.

Por Alejandro Fernández Martínez

La traición de quienes tuvieron en sus manos la pasada elección Presidencial, aunado a la falta de civismo patriótico, son las principales causas de la derrota del candidato de la Movimiento Progresista Andrés Manuel López Obrador, dijo el economista y líder del PRD Norberto Amaya Aquino.

Sin hacer de lado, el alto grado de sensibilidad patrióticaque estuvo ausente en el pasado proceso electoral, Amaya Aquino, denunció la actitud de los responsables de la elección de todos los partidos de izquierda, quienes no cumplieron con su cometido.

Para Amaya Aquino, la certeza y presunción de parte de Agustín Ortíz Pinchetti, al igual que Fernando Jara, responsables del grupo auto denominado del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), a nadie convencieron de que las casillas estaban cubiertas y que supuestamente daban una garantía del triunfo para AMLO.

Por otra parte, denunció los rémoras que resultaron ser Alberto Sedeño y Ariel Manelick, quienes manejando a su antojo el distrito seis federal electoral, y obedeciendo intereses obscuros, jamás inscribieron a la gente para custodiar casillas.

De igual forma, el día de la elección les negaron el apoyo económico de 200 y 300 pesos prometido a los vigilantes del voto de AMLO, -ni una torta o refrigerio acercaron a éstos ciudadanos-, desapareciendo misteriosamente el dinero que debieron entregar a los más de 400 casilleros inscritos.

Mario Chapital se vendió
a Enrique Doger

Amaya Aquino, también arremetió contra el candidato del distrito seis Mario Chapital de la Rosa, quién antes de la elección, ya era calificado mediante un “secreto a Voces” haber negociado la candidatura a favor del diputado electo Enrique Doger.

Entre los corrillos políticos y de los mismos perredistas reveló, previo al conteo de voto por voto, casilla por casilla que se realizó en su distrito, surgió el comentario, que el más miedoso por abrir las casillas resultó ser el mismo candidato Mario Chapital de la Rosa, y no Enriquie Doger, el motivo aparente era supuestamente, que no tendría con que pagar, ni con las dietas que pudiera obtener de la representación federal, el recurso que ya había cobrado con la negociación de su candidatura, dijo.

Por último, no dejó de criticar la falta de civismo y nacionalismo de los encargados de vigilar las casillas, que por no recibir un apoyo económico y una refrigerio, abandonaron las casillas y dejaron al garete el fraude para los priistas, olvidándose que tuvieron en sus manos el destino de nuestro país.