POLÍTICA

lunes, 11 de febrero de 2013

En campaña les ofreció mejorar salarios y condiciones laborales, luego de dos años, nada ha cumplido...

El edil de Puebla Eduardo Rivera es calificado por sus trabajadores como mentiroso.


Rivera Pérez presentó su segundo informe en medio de protestas en su contra.

Raquel Martínez Brenis

Aprovechando el segundo informe de labores del alcalde Eduardo Rivera Pérez, los trabajadores sindicalizados del Ayuntamiento de Puebla realizaron un movimiento de “brazos caídos”, como protesta al incumplimiento a sus ofrecimientos de campaña y a la reiterada negativa de aumentarles el salario  y a entregarles los implementos correspondientes para el desarrollo de su tarea.

Trabajadores recordaron que en campaña, cuando Rivera Pérez andaba buscando el voto, les ofreció mejorar sus salarios y las condiciones de trabajo si es que lo apoyaban, pero que lamentablemente  una vez que ganó las elecciones, se olvidó de sus promesas.

Lamentan que en los dos años de su gestión, Eduardo Rivera por un lado se ha negado a subir los sueldos a los trabajadores ni un peso y por el otro a los regidores les aumentó el salario  de 35 mil  a 87 mil pesos, mientras que a sus secretarios a más de 96 mil pesos.

Se niega a entregar herramientas y otros implementos de trabajo porque dice no hay dinero y se gasta cientos de miles de pesos en sus viajes internacionales y en promocionar su imagen, porque sueña con se gobernador.

Todo esto sin contar que como candidato también prometió entre otros ofrecimientos, la pavimentación de mil calles por año, muchas de ellas con cemento hidráulico, promesa que también incumplió ya que se demostró que no pavimentó ni 300. Este año mejor no volvió a tocar el tema de las calles.

Finalmente dijeron que el segundo informe que presentó Eduardo Rivera, además de que está lleno de mentiras, en materia de seguridad pública, al municipio de Puebla lo ha convertido en un territorio donde nadie está seguro, ya que los robos y asaltos se dan todos los días, principalmente en el centro de la ciudad.

 

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