Fue un gasto grosero en un estado lleno de pobres…

No había necesidad de gastar 400 millones de pesos en la rueda de la fortuna, desde el Cerro de Loreto se aprecian los techos de las casonas y edificios.

 

Por Alberto Mendoza R.

Si la pretensión del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas era que los poblanos y visitantes de otras entidades federativas  y del  extranjero conocieran las azoteas de las casas y centros comerciales de la ciudad de Puebla,  no tenía necesidad de haber gastado los más de 400 millones de pesos en la rueda de la fortuna que instaló en la zona de Angelópolis y que originalmente pretendía se instalara en la zona de Los Fuertes.

La “estrella de Puebla” como pomposamente  bautizaron lo  que en cualquier pueblo de México se conoce como rueda de la fortuna,  fue un gasto innecesario, ya que la ciudad se ve perfectamente desde el mismo centro de la  Angelópolis, sin colas y sin pagar un centavo, y lo mejor, sin el riesgo de quedarse atorado porque se descomponga el aparato, desde el cerro de los fuertes de Loreto y Guadalupe desde donde se aprecia muy bien parte de la capital poblana.

Acompañamos esta nota con imágenes tomadas desde este histórico lugar, por la tarde noche, desde el mismísimo territorio, que los mexicanos de la época defendieron propinando tremenda paliza al mejor ejército del mundo de la época, a pesar de los panistas de aquellos años, llamados conservadores,  que soñaban, como  actualmente siguen soñando, nos gobernara un emperador de rubios cabellos y ojos azules.

Hoy los conservadores del siglo XXI o también llamados panistas, los que lograron imponer en Puebla por medio de una antinatural  alianza partidista llamada “Puebla Unida”  simplemente se le llama gobernador, aunque  se sienta emperador.

Como señalé  al principio, no había necesidad de tremendo gasto, máxime cuando el estado cada día se sume más en la miseria. Según reciente informe de  Coneval, en los últimos dos años de gobierno del emperador, perdón, del gobernador panista Rafael Moreno Valle, el número de pobres se incrementó de manera preocupante.

Si la idea era que la gente observara desde las alturas la ciudad, hubieran invertido en “miralejos”, como los que se instalan en los edificios altos de las principales ciudades del mundo y colorín colorado, todo quedaba arreglado, las azoteas con tinacos oxidados y tendederos llenos de ropa hubieran quedado a la vista y nuestro gobernador hubiera conseguido su sueño.

Pero si como parece ser, se trataba de hacer negocio con el dinero de los poblanos, el gobernador hizo lo correcto. Derrochar esa millonaria, grosera y obscena  cantidad de dinero  en aras de los negocios e incrementar los ahorros del ejecutivo y sus socios queda claro que fue el objetivo. En “Sintesis”  el relajito de la ruedota, o ruedita, según el punto de vista, fue hacer negocio.

Pero como diría la chimoltrufia, yo como digo una cosa digo otra, los trabajos que hicieron frente al fuerte de Loreto, desde donde se aprecia la ciudad gratuitamente quedaron de primera, a pesar de que como dicen los expertos, rompe con el entorno histórico, pero, ese mejoramiento ha permitido que las familias retomen el cerro de Los Fuertes como punto de reunión de las familias. Por las noches se ve my bien, y la vista de la ciudad se ve maravillosa, desde donde por cierto se puede ver el juguete del gobernador, “la estrella de Puebla” (para que no se enojen).  (A)