ESTRUCTURAS NAVIDEÑAS Y COLADERAS ROTAS TRAMPAS PELIGROSAS PARA LOS POBLANOS.
Por Alejandro Fernández Martínez
La ciudadanía, vía correo electrónico, nos envió sus quejas para advertir, sobre el peligro que representan las estructuras utilizadas por autoridades, para presentar los motivos navideños, así como las coladeras rotas de la aún no inaugurada 11 sur, que resultan verdaderas trampas, para quienes caminando o circulando por las calles de la Angelópolis, la distracción de un segundo los puede llevar a una emergencia de Hospital.
Con la invitación hecha por nuestros seguidores, nos dimos a la tarea de inspeccionar sobre el tema, sin caminar mucho, nos percatamos del alto peligro que representan las estructuras utilizadas, que anuncian la llegada del invierno del 2014, cuyo material de ángulo de hierro, fijado a los postes de alumbrado público que sostienen adornos, ya han ocasionado descalabros entre la ciudadanía.
Una prueba ocurrió, frente al edificio del Instituto Municipal de la Mujer, donde los vigilantes informaron a este reportero, sobre el peligro que han corrido algunos señores de edad, al caminar con la vista baja, se han golpeado, afortunadamente sin mayores consecuencias.
Otra evidencia, ocurrió a la entrada del Museo Amparo, cuyo vigilante, añadió que los turistas han advertido del peligro. Por otro lado, en nuestro recorrido por 5 de mayo, otra calle infestada por éstas estructuras, el peligro es mayor, ya que ante el sin número de viandantes que literalmente corre por esta rúa, las confusiones y las distracciones se disparan.
Otra de las denuncias, alerta a los motociclistas, ciclistas y ciudadanos que deban cruzar, sobre la calle 11 sur, (desde Mayorazgo hasta San Ramón) recién construida de concreto hidráulico, cuyo paso de trailers y camiones pesados, que acarrean grava y piedra, han vencido las tarjeas de la aún no inaugurada 11 sur, convirtiendo las coladeras, en trampas mortales para toda persona que circule a pie o en dos neumáticos.
El llamado es para la Secretaría de Infraestructura, a que revisen los contratos de las empresas encargadas de la confección de las tarjeas, cuyos materiales resultaron muy endebles, menospreciando el paso continuo de carros, camiones y tráiler, que acostumbran transitar al sur de la ciudad, rodando toneladas de materiales pesados.
De igual manera, el llamado para la Comuna, es que revisen la instalación de estas estructuras, que están demasiado sólidas para el cabezazo de un transeúnte, principalmente, para la gente de la tercera edad, que ya no cuenta con los reflejos para poder sortear éstos armastrotes.
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