Por Influyentismo de Enrique Moreno Valle Sánchez, tío del gobernador, desalojan a abogados y contadores de céntrico edificio.
Por Alejandro Fernández Martínez
Impotencia, coraje y rabia, fue la respuesta de abogados y contadores, al recibir la noticia, de que su edificio, que por más de 30 y 35 años rentaron, necesariamente lo deben desocupar, ya que, para principio del 2015, debe estar construido un Hotel de lujo.
Los inquilinos, que ya iniciaron una contra ofensiva frente al propietario del domicilio de la 3 oriente 1004, Enrique Moreno Valle Sánchez, (tío del gobernador) ya acudieron a todo tipo de dependencia para quejarse del atropello, pero hasta la fecha, nadie hace caso, todos los toman a “locos”.
Señalaron los denunciantes, -sin mencionar sus nombres- que se han quejado ante las oficinas recaudatorios, ante el ayuntamiento, ante la Procuraduría Federal del Consumidor, el INAH, incluso Protección Civil, ya que al inicio de la construcción y ante la necesidad de ampliar la cisterna a más de 20 mil litros, se toparon con subterráneos característicos de la zona, y nadie ni por accidente, asomó las narices para investigar.
“Mon Jer”, es el nombre del inmueble del 1004 en la 3 oriente, donde durante mucho tiempo trabajó una Notaria, propiedad de la familia Moreno Valle, y dijeron, durante este tiempo perduró la paz, jamás hubo problema alguno, siempre existió la tranquilidad y la armonía entre vecinos.
Los quejosos, declararon que son 27 los despachos en los que por años, laboraron dando prestigio a sus firmas y oficinas, y hoy que se encuentran acreditados, les anuncian el desalojo, ¡ no se vale exclamaron!
Como prueba de su dicho, acompañamos al lugar donde nos mostraron el avance que algunos despachos ya transformados, donde, indicaron se pretende serán los baños.
Indignados por no saber qué hacer, y cuál será su futuro inmediato, los denunciantes dijeron, que no saben cómo es que hizo el dueño para iniciar los trabajos de remodelación, sin siquiera tener permiso de uso de cambio de suelo, permisos del ayuntamiento para construir, ni sindicato alguno que este pendiente de la seguridad de los alarifes, que resultaría muy grave, en caso de algún accidente laboral.
No obstante, a principio de año (febrero) los inquilinos sufrieron un incremento del 30% de incremento a la renta, pagos que con tal de mantener su despacho en éste lugar, accedieron sin importar las ventajas o desventajas que esto causaría.
Exigieron a las autoridades estatales y municipales, a que echen un vistazo al lugar, ya que dijeron, si fuera otro el propietario -común y corriente-, ya estarían encima de la obra, autoridades estatales, municipales y hasta federales.
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